La fotografía móvil se encomienda a la programación para superar sus limitaciones
By Zigor Aldama
La cámara se ha convertido en uno de los elementos más determinantes a la hora de decantarse por un teléfono móvil. Conscientes de ello, los fabricantes han abierto una guerra sin cuartel que ha propiciado el desarrollo de la fotografía móvil a una velocidad mucho mayor que el de la tradicional. El número de lentes en los aparatos se multiplica para ofrecer al usuario un creciente rango focal -desde grandes angulares que cubren un amplio campo de visión, hasta teleobjetivos que acercan los detalles más pequeños-, los objetivos son cada vez más luminosos, los sensores ganan tamaño, y el software se encarga de compensar las carencias y las limitaciones propias de un hardware constreñido por las dimensiones del dispositivo en el que se monta.