¿A qué huele un algoritmo? La tecnología conquista tu perfume
Firmenich es una empresa suiza fundada hace más de un siglo. Desde 1895, se ha dedicado a la creación de fragancias y sabores. De sus laboratorios han salido perfumes como Aqua di Gio, Boss Bottled, Flower by Kenzo o Light Blue, de Dolce&Gabbana. Estos fueron fruto de la imaginación humana, los próximos podría inventarlos una máquina. Hace ya un año que Firmenich inauguró su Digital Lab, con la colaboración de la Escuela politécnica federal de Lausana (EPFL). ¿El plan? Explorar el potencial de la inteligencia artificial en los procesos creativos de la marca.